domingo, 5 de abril de 2009

LA POÉTICA HUMANITARIA Y BELLA DE LUIS ARIAS MANZO

4/05/2009 10:03:00 p. m.

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LA POÉTICA HUMANITARIA Y BELLA DE LUIS ARIAS MANZO

por José Martínez Fernández.


Luis Arias Manzo es un importante poeta chileno, que, aparte de hacer sus creaciones, se ha dado a la tarea de difundir a bardos de todo el orbe en su sitio POETAS DEL MUNDO, el cual dirige con mano diestra y experta.

En dicho espacio Luis Arias Manzo ha hecho de su lucha por la paz, la justicia, la solidaridad, un verdadero apostolado. No un apostolado casi místico, sino que un apostolado real.

Cuando Chile sufrió su quiebre democrático él tenía sólo 17 años. Dos años más tarde se fue del país.

Muchos años vivió en Argentina.

Los últimos 12 años de su exilio estuvo en la patria de Sartre y Camus, en la tierra de Eluard y Aragon. Es decir radicó en Francia.

Volvió a estos lares (Chile) en 1991. Aquí instaló -en Santiago- una librería.

El poeta es autor de tres libros: AGUALUNA, MIL AÑOS DE AMOR e INSTANTES. El tercer libro es el relato de un viaje, por tierra, a Brasil. Tiempos del exilio anterior al francés. Todos son libros de poemas, todos tienen su calidad intrínseca del hablante poético comprometido con principios humanitarios.

En AGUALUNA encuentro yo los logros mayores de Luis Arias Manzo. Lo onírico es un ente muy claro en sus poemas llenos de belleza verbal y de temas infaltables en un luchador como ha sido él. La paz es el primer elemento perseguido por Arias Manzo. No esa paz “relamida”, “falsa” y “vacua”. Su poética por la paz se sustenta en la búsqueda de un mundo mejor: social y humanamente.

Desde ese punto de vista Luis Arias Manzo no es sólo un poeta de calidad, sino que un hacedor que busca un mundo mejor. Ese mensaje ha sido, quizás, el que lo ha llevado a ser invitado a lejanos países donde ha compartido palabras con altos personajes.

El que sigue es uno de los poemas que integran su primer poemario.

Agualuna XIV

Amor de agualuna, hace unos días tuve un sueño;
Estábamos en un bosque de árboles nativos
Éramos un grupo de guerreros y guerreras,
Luchábamos por causas justas y divinas,
Y de pronto vino la asonada,
Éramos presa de una emboscada
De donde nadie salió con vida,
Fuimos salvajemente asesinados,
Pero antes tuvimos tiempo para un pacto
El que todos con nuestra sangre firmamos.

Pasaron los años y los siglos,
Las edades de los calendarios,
Vinieron las guerras y las ocupaciones,
La blasfemia de las leyendas de los ancestros,
Y la impostura de los verdaderos guerreros,
Las masacres y los golpes de Estado
Las torturas y los crímenes sin nombre,
Como si hubiesen sitiado al mundo,
Todo lo veía en una secuencia de imágenes
Que desangraban mi nombre.

De pronto apareció la luz apagada por los años.
Era una mirada conocida y sufrida por el tiempo.
Me tomó la mano, la apretó hasta doler.
Te estaba buscando, me dijo.
Te he buscado y por fin te encuentro.
Sabes, ya estamos todos de vuelta,
Ya todos estamos cumpliendo con el pacto,
Regresamos del bosque de luciérnagas,
Allí donde nos quemaron la piel y los huesos,
Pero olvidaron de quemarnos el alma.

Me he despertado de aquel recuerdo, amor,
Y en mi interior enardecido por los incendios,
Que vibra como se estremecía con tu mirada,
No puedo dejar de ver la línea discontinua
Del horizonte en llamas de sol y tierra sombría.
Amor, déjame encontrar el abrigo en tu fortaleza,
Dame la explicación a tantas cabalgatas de oro
Por llanuras mil veces transitadas en llanto y espera,
Mi alma se me aprieta como nudos marinos,
Dame tus besos de agualuna, quiero sentir que vivo.

Leído el poema queda claro que el vate Luis Arias Manzo nos ha resumido la historia del dolor humano, que se ha guiado por el camino en que el hombre no debe buscar ser lobo del hombre, sino su semejante en derechos y obligaciones y que ello le ha costado caro, porque la libertad de todos tuvo un alto costo.

Fueron millones los hombres que, a través de la historia, sacrificaron sus vidas para construir una sociedad como la de hoy y, aún así, queda todavía mucho trecho por recorrer.

La poética hermosa de Luis Arias Manzo ha interpretado muy bien al hombre y su lucha a través de los tiempos.